La planificación ambiental es necesaria pero los documentos técnicos referidos al Plan de Gestión Integral (PGI) del Noroeste son mejorables y presentan carencias importantes, según el comunicado conjunto que difundieron ayer la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) y la Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife). Estas organizaciones conservacionistas han presentado un documento de alegaciones en el que apoyan la aprobación del plan de la Red Natura en la comarca del Noroeste y reclaman mejoras «para alcanzar los objetivos planteados por la Directiva Hábitats y la legislación estatal».
ANSE y SEO/BirdLife también lamentan «la postura de determinados colectivos respecto a esta obligación» y recuerdan que los plazos «han sido ampliamente sobrepasados, lo que podría tener consecuencias graves para el medio ambiente, la economía y la sociedad regional». Estas entidades ecologistasconsideran «irresponsable» que se presione a la Administración «para que anteponga los beneficios privados en detrimento del interés general». «La planificación de los espacios protegidos de la Red Natura 2000», añaden, «debe interpretarse como una oportunidad para el mantenimiento de actividades tradicionales y para el establecimiento o fomento de nuevas iniciativas económicas». Las principales alegaciones de ANSE y SEO/BirdLife son las siguientes:
Canteras y parques eólicos. El Plan de Gestión Integral «apenas aborda cuestiones como los conflictos con el urbanismo, el uso del agua o con los aprovechamientos energéticos (parque eólicos) y mineros (canteras de roca ornamental), actividades que suponen importantes amenazas para los elementos clave de la Red Natura 2000».
Objetivos concretos. Se pide que se establezcan los objetivos de conservación y el estado favorable de conservación de las aves y hábitats de interés comunitario.
Contratos con propietarios. ANSE y SEO/BirdLife proponen, «tal y como requiere la Directiva», contratos entre la Administración y los propietarios de terrenos para garantizar la conservación de la Red Natura 2000.
Más inversión. Piden que la Administración incremente el esfuerzo inversor previsto para el desarrollo del PGI por considerar insuficientes los 54 € por hectárea para los próximos seis años, «ya que cálculos más realistas apuntan a inversiones de entre 110-190 €/ha).
Más documentos técnicos. Sería necesario, a juicio de ANSE y SEO/BirdLife, que se incluyesen los Planes de Ordenación de los Recursos Naturales de la Comarca del Noroeste (Almadenes y Cañaverosa) y se aprobasen las Áreas de Protección de la Fauna Silvestre. Estas organizaciones lamentan que no hayan sido aprovechados «con mayor intensidad el esfuerzo y dinero público invertidos en documentos técnicos elaborados previamente», tales como el Plan de Desarrollo Sostenible y Ordenación de los Recursos Naturales o los Planes de Gestión redactados en el contexto del proyecto LIFE del Noroeste. «En este sentido, el Plan de Gestión Integral podría haber recogido, para el ámbito de la Red Natura 2000, lo establecido en el documento ‘Plan de Desarrollo Sostenible y Ordenación de los Recursos Naturales de la Comarca de la Noroeste’, documento redactado en 2004 por la entonces Dirección General de Medio Natural y que establecía una zonificación y regulación muy detalladas para la comarca», explican.